per José Tomás Izquierdo
Biòleg i tècnic de gestió forestal
ESPADÀNIQUES agraeix a l'autor la cessió d'este article tan necessari sobre la gestió i l'ordenació dels recursos naturals, publicat enguany en el llibre de festes de Cirat.
“Todos debemos ir
engrosando ese pequeño ejército, que el día de mañana se considerará un
ejército heroico, mucho más que los que lucharon con las armas en la mano. El
ejército de los que un buen día dijeron que había que hacer algo para proteger
a una Madre que no se queja, que nos ha dado todo lo que tenemos... y a la que
estamos matando”.
Félix Rodríguez de la Fuente
Los montes
Han pasado 25 años desde el nefasto incendio que el dos de
julio de 1994 comenzaba a quemar, debido a un rayo, buena parte del sur de la comarca
del Alto Mijares, desde Espadilla hasta Pina de Montalgrao, y arrasó los montes
de Espadilla, Ayódar, Fuentes de Ayódar, Torralba del Pinar, Villamalur,
Pavías, Higueras, Caudiel, Toga, Torrechiva, Cirat, Arañuel, Montanejos, Montán,
Fuente la Reina, Pina de Montalgrao, Benafer. Calcinó un total de 19.309 ha.
En aquella ocasión, las condiciones meteorológicas propiciaron
la formación de algunos núcleos tormentosos, con bastante actividad eléctrica y
escasa precipitación, las conocidas como tormentas secas estivales. Un rayo fue
el detonante del incendio, sin embargo, las causas que favorecieron que de
aquel inicial conato se desarrollara el peor incendio de la comarca hasta la
fecha son varias y complejas.